Pentecostés

Hoy estábamos todos los discípulos reunidos con un mismo objetivo, y de repente ha venido del cielo un ruido tempestuoso con una ráfaga de viento que ha llenado toda la casa en la que nos encontrábamos.
Se nos han aparecido unas lenguas de fuego que nos  han llenado a todos de Espíritu Santo.

Ha sido algo muy extraño , porque todos hemos empezado a hablar en nuestra propia lengua , nuestra lengua natal.
De pronto ha aparecido gente de todos lados estupefacta al ver lo que estaba ocurriendo , aunque algunos han hecho burla de ellos , la gran mayoría ha quedado admirado del poder de Dios.

San Pedro - 33 D.C.